Este jueves el Gobierno aseguró que en el país no operan bandas delictivas haitianas y que el dominicano acusado de integrar esos grupos de secuestradores de Haití y quien fuera atrapado por la Policía, se trata de un hecho aislado.
La afirmación llegó de manos del vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, que expuso en comunicado difundido por las autoridades haitianas, se exponen las confesiones que habrían sido obtenidas en un interrogatorio realizado a un individuo nombrado “Molaï Ortiz Mieses”.
Figueroa explica a través del documento que, de acuerdo a los organismos de inteligencia nacionales, Luis Alejandro Ortiz Mieses (Alias Molaï), aparece registrado como dominicano en la base de datos de la Junta Central Electoral (JCE), algo que fuera confirmado por comparación de huellas dactilares y por sus familiares, quienes aseguran no haber tenido contacto con él por más de una década.
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Por su parte, el director de Estrategia y Comunicación Gubernamental aseveró que Ortiz Mieses fue declarado como prófugo de la justicia dominicana en 2013, por participar en el secuestro de un comerciante en el municipio de Guerra, de Santo Domingo.
Figueroa certificó además que los informes de organismos de inteligencia nacionales no identifican a otros dominicanos como integrantes de ninguna de las bandas en territorio haitiano.
Mostró igualmente que Haití no cuenta con la tecnología ni registros fiables, para obtener información veraz sobre la identidad de los miembros integrantes de las bandas criminales.
No obstante, el funcionario de Palacio comunicó que República Dominicana, en cambio, si tiene un sistema de registro biométrico y otras técnicas de investigación que le permiten identificar a los principales cabecillas de las bandas que operan en Haití.
Por tanto, las autoridades dominicanas certifican que en el territorio nacional no operan ninguna de las bandas haitianas y que el caso actual se trata de un hecho aislado de un prófugo que reside desde hace unos diez años en territorio del país vecino.
