Científicos chinos desarrollaron una vacuna para el COVID-19 que se inhala y llega a los pulmones en forma de polvo seco, y cuyo compuesto provoca una importante respuesta inmunitaria que previene la infección en ratones, hámsters y primates no humanos.
Los detalles de esta candidata a vacuna, desarrollada por el equipo de Guanghui Ma, de la Academia China de Ciencias de Beijing, se han publicado este miércoles (13.12.2023) en la revista Nature.
Desde el inicio de la pandemia, a principios de 2020, se han hecho numerosos esfuerzos para desarrollar y aprobar vacunas contra el virus del SARS-CoV-2 causante del COVID-19.
La mayoría de las vacunas que han tenido éxito se administran mediante inyecciones intramusculares que provocan la producción de anticuerpos y reducen los síntomas de la enfermedad. Pero estas vacunas no son capaces de prevenir la infección porque no logran inmunizar a los tejidos de las vías respiratorias (por donde entra el virus al organismo).
Además, estas vacunas líquidas tienen que conservarse y almacenarse en frío, lo que tiene un coste adicional.
Tomado de DW